Jimenezvivo
Alrededor de 35 personas que fueron deportadas hace días esperan a la orilla de las vías del tren en el conocido barrio de la estación de nuestra ciudad, para poder colgarse de la denominada bestia de acero y ser trasladados algunos a Veracruz, otros a Tijuana y otros más a una pequeña población de Sonora. Los sueños desmoronados, las bolsas vacías y la angustia de tener que atravesar otro calvario para llevarlos ahora de regreso a sus pueblos, hacen que sus rostros se vean devastados y sin esperanza, pero gracias a un notable grupo de vecinos de la estación, a unas intrépidas maestras de nuestra comunidad y a la convocatoria de la radiodifusora Halcón Estéreo los viajeros errantes fueron alimentados y se les permitió asearse en algunos hogares de aquel sector, además de que fueron dotados de algunas prendas y calzado ya que la ropa que usaban estaba prácticamente hecha garras. Ahora sólo resta esperar que pase el tren, que por cierto no se detiene desde hace tiempo en nuestra comunidad y ocasiona que el reto de subirse en él sea un verdadero paso de la muerte. Algunos jimeneses les llevaron víveres y mochilas para guardar sus provisiones para la jornada que les espera, otros más les llevaron algo de dinero en un afán de que alcancen a comprar sus boletos en camión, pero la verdad no es suficiente aún. Mañana jueves esperamos poder ir a visitarlos de nueva cuenta para enterarnos si pudieron abordar peligrosamente el tren que de manera clandestina los lleve con sus familias, o bien la generosidad de los donativos haya sido suficiente para adquirir sus boletos para el camión que los lleve de regreso.
